Ayer lunes nos dejó José María Ponce

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Ayer lunes nos dejó José María Ponce.

Trabajó con nosotros en el rodaje de «Así se rodó Carne quebrada«, de donde saco las fotos inéditas que tiró Oscar Fernández Orengo, pero no puedo escribir nada mejor que lo que acabo de leer en el muro de Cecilia Estévez Estévez, la persona con quien vi más frecuentemente a José María:

«Hoy es lunes. Los lunes era nuestro día de llamada, videollamada o pedir disculpas para cambiarla al martes porque el finde había sido demasiado duro para el cuerpo.

Pero hoy no he podido hacerte la crónica de mi fin de semana y no te he escuchado decirme “ay Chechi, chechi, no haremos carrera de ti…”
Yo no sé cuánto tiempo voy a seguir escribiendo las páginas de este libro tan disparatado que tengo como vida pero me duele que no vayas a estar en más capítulos junto a mí.

Hay pérdidas que te arrancan un trozo de alma, hoy lo he sentido así. No un trozo pequeño, un trozo bien grande.

Últimamente estabas muy empeñado en darme esas “patadas en el culo” que creías que necesitaba para explotar. “Cómprate el traje de buzo del artista porque vales. Todas las cosas que tocas son la ostia”. Voy a buscar por todas partes ese traje para no fallarte.

Gracias por ser el que me, nos, enseñó a ver la vida de otra manera. Como escribí hace poco en un texto que no llegaste a leer, Ponce es un hombre libre no sujeto a industrias ni instituciones. Un maestro que no tiene reparos de mostrarnos sus conocimientos y por suerte, arengarnos a seguir su legado.

Qué bien que supiste que te queríamos, qué bien que no parábamos de decirnos que nos queríamos mucho. En mi corazón para siempre José María Ponce».

Publicado en: 19/03/20241,6 min. de lectura321 palabrasCategorías: Personal

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