Gonzalo García-Pelayo. La revelación del BAFICI que hizo 10 películas en un año

Gonzalo García Pelayo, para muchos un desconocido, para otros un consagrado cineasta español, es uno de los “mimados” de la nueva edición del BAFICI -festival de cine independiente organizado por la Ciudad de Buenos Aires- que empezó el miércoles 17 de abril y se extiende hasta el domingo 28 y que proyectará 7 de las 10 películas que rodó en Argentina –Bruna, Salón de uñas, Eloísa y las niñas toman un helado, Cuatro hombres, Dos hermanas: Pilar, Dos hermanas: Paula y Ritmo 2×3– durante el 2024.

Emprendedor, contador de historias, productor musical, aficionado al negocio de los bitcoins y creador de un método con el que saltó la banca en casinos de Europa y cosechó fortunas en el juego de ruleta (se han hecho películas y documentales con la curiosa hazaña).

En las publicaciones, a este cineasta se le ha comparado con directores de renombre como Luis Buñuel y Pedro Almodóvar.

Al ser consultado sobre estas comparaciones, expresó su aprecio por el apodo que le otorgaron en Francia: el “eslabón perdido“. Se sintió cómodo con este elogio, reconociendo ciertas similitudes estilísticas entre su cine y el de Buñuel y Almodóvar.

Respecto a su capacidad para filmar 10 películas en un año, reveló que su situación económica favorable, proveniente de sus inversiones en criptomonedas, le permitió financiar sus proyectos cinematográficos. Además, mencionó su reciente separación de su esposa, con quien compartió numerosos viajes relacionados con su pasión por el cine, lo que lo llevó a retomar la filmación de películas. Este proceso comenzó con 10 películas europeas, seguidas por otras 10 argentinas. En España, generó controversia al presentar sus películas debido a su sistema de producción rápido y eficiente, así como a la financiación ajustada en comparación con la industria cinematográfica local.

En relación con su enfoque hacia la creación cinematográfica, citó su preferencia por la acción sobre la reflexión. Señaló que sus películas europeas no tienen un tema predefinido, sino que se desarrollan a partir de la ubicación, mientras que para las argentinas cambió su enfoque hacia las historias que mejor se adaptaran a los actores con los que colaboraba, particularmente con Lucía Seles, a quien admiraba profundamente.

Respecto a su sistema de producción, destacó su enfoque en la acción y la filmación sin buscar la perfección, una perspectiva que contrasta con las normas de la industria cinematográfica.

La primera visita del entrevistado a Argentina fue durante la presidencia de Raúl Alfonsín, marcando el retorno de la democracia en el país. Desde entonces, ha visitado Argentina en 15 ocasiones, convirtiéndola en el país que más frecuenta, seguido por India con 12 visitas y Estados Unidos con 9. Además, menciona haberse enamorado del país y de varias mujeres argentinas.

Cuando se le pregunta sobre sus primeros amores en Argentina, responde entre risas que primero se enamoró de las mujeres argentinas y luego del cine del país. Destaca películas como “Historias extraordinarias” de Mariano Llinás, la última película de Martín Rejtman y “Trenque Lauquen”. También expresa su interés en promover el cine de Lucía Seles a nivel internacional.

En cuanto a su afición por los juegos de azar, menciona que aún no ha cerrado esa etapa de su vida y está considerando la posibilidad de jugar al póker en los casinos locales. Comenta que una vez tuvo la idea de vivir de los juegos de azar después de una experiencia en un casino, donde se dio cuenta de que era posible ganar mediante la estadística.

Respecto a su reputación en los casinos, admite que en algunos lugares lo reconocen y puede generar cierto temor entre los empleados. Recuerda un incidente en Madrid donde sintió miedo después de que descubrieran su método para ganar siempre.

Sin embargo, aclara que no es peligroso y relata un episodio particular en Ibiza donde tuvo problemas con una mafia del sur de Francia que se negaba a pagar después de que él ganara en el casino. A pesar de su fama, menciona que hay ciertos casinos, como los de Moscú o la India, que prefiere evitar incluso si le apuntan con una pistola.

Fuente: El Destape Web

En cuanto al contenido de sus películas, explicó su interés en retratar la vida cotidiana y los personajes comunes, siguiendo la tradición de cineastas como John Ford y Roberto Rossellini. Reconoció que su sistema de producción, que implica la creación de múltiples películas en un corto período de tiempo, enfrenta cierto escepticismo por parte de la industria y los críticos, quienes dudan de la calidad de su trabajo debido a su rapidez.

A pesar de las críticas, valora profundamente la opinión de los críticos y se siente satisfecho cuando su obra es reconocida. Aunque en el pasado se sintió molesto por la falta de atención hacia sus películas, ahora prefiere ser ignorado a recibir críticas negativas. Está especialmente contento de poder presentar su cine en festivales como el BAFICI, donde tiene la oportunidad de que su trabajo sea apreciado por el público.